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Siempre es importante ahorrar energía eléctrica, y más cuando su uso implica pagar altas cantidades de dinero. Además, no debemos olvidar que el hecho de no consumir tanta electricidad, también ayuda al planeta, así que te invitamos a que apliques ciertos tips, que de seguro se te harán muy fáciles y pronto los volverás una costumbre.
Desde desenchufar el cargador del teléfono móvil cuando ya no lo estemos usando, hasta no abrir y cerrar la nevera o el refrigerador tantas veces, son pequeños pasos que podemos tomar para que el ahorro de energía eléctrica sea verdadero y fructífero.
Consejos para consumir menos electricidad
Aunque en la temporada decembrina, hay más luces que en cualquier otra época del año, esto no tiene que implicar que consumamos mayor cantidad de energía eléctrica. Por ejemplo, es esencial que al salir de una habitación, apaguemos la luz, puesto que, mientras mayor sea el tiempo que dejemos estas luces encendidas, mayor será el consumo que tendremos.
Si eres una persona olvidadiza, porque siempre está pensando en muchas cosas, te recomendamos que instales sensores de luz, los cuales se encienden con el movimiento, cuando alguna persona entre en la habitación, y se apagan cuando ya no haya nadie.
Otro dato que te brindamos es el de mantener las lámparas limpias. Parece increíble, pero esto ahorra aproximadamente un 20% de la energía, porque un foco sucio pierde el 50% de su luminosidad y pensamos que es necesario añadir otros bombillos, cuando realmente no hay necesidad de eso.
También debes estar muy pendiente de los electrodomésticos, que consumen casi el 60% del total de la energía eléctrica. Por ejemplo, si estás usando alguna plancha, tenazas para el cabello, parrillas, ollas eléctricas, calefactores, entre otros, apágalos antes de que hayas terminado de usarlos, para aprovechar el calor acumulado. Por supuesto, debes tomar en cuenta que ese calor solo durará unos minutos, así que no los apagues cuando apenas vayas por la mitad de tu tarea con ellos.
Limítate a usar tu lavadora sólo cuando sea necesario, para que laves la cantidad de ropa justa. Esto quiere decir que no debes colocarle poca ropa, porque gastará más electricidad que lo normal, ni tampoco debes llenarla más que su capacidad, porque se forzará el motor. Organízate y lava un día en el que sepas que ya tienes una buena cantidad de ropa acumulada.
Tu rutina diaria seguramente se verá afectada de manera positiva, con estos simples consejos. Practica estos consejos y ya verás que en menos tiempo de lo que piensas, habrás adquirido el hábito de ahorrar energía eléctrica.
