Los cambios climáticos producen factores que afectan directamente a la producción energética, ya que, para el futuro, se espera que haya menos lluvia y por lo tanto menos escorrentía en los ríos, menos agua en los pantanos y menos generación hidroeléctrica.
¿La producción energética realmente se ve afectada por los cambios climáticos?
La respuesta a esta pregunta es afirmativa porque si hay un aumento de la temperatura y un descenso en las precipitaciones, en la mayoría de los ríos y lagos habrá cada vez menos agua y esto solo quiere decir que la energía hidráulica se verá muy afectada en los tiempos de verano.
De esta forma, pueden verse afectadas las fuentes de producción y también el consumo por parte de los usuarios puede hacer mella. Por esta razón existen campañas para concientizar a las personas para que consuman energía y participen en la producción energética de manera consciente.
Otro elemento que incide directamente en la producción energética son los cambios en la demanda del agua que podrían ser afectadas por un clima más cálido con el cual se necesitará aumentar la abstracción de las fuentes de agua para lograr reunir los requisitos de refrigeración y se afectan otros sectores como agricultura, energía, protección ambiental, industria, turismo, entre otros.
Esto también afecta la biomasa, cuando es sustituta de combustibles de origen fósil, para la generación de energía eléctrica, lo cual reducirá la cantidad de agua de refrigeración descargada en los cursos de agua.
Cabe destacar que Gustavo Mañez, coordinador de Cambio Climático para América Latina y el Caribe de ONU Medio Ambiente, aseveró que de aquí al año 2040 habrá una pérdida de un 25% de toda la generación hidroeléctrica, lo cual indica que los cambios climáticos afectarán de forma negativa a la producción energética.
Esto quiere decir que se prevé que las lluvias mengüen a medida que vaya pasando el tiempo y, por lo tanto, más adelante se podrían generar apagones y fallos de suministro. Actualmente, en Latinoamérica el 75% de los pobladores sin energía eléctrica se encuentran en Haití, Perú, Argentina, Brasil, Colombia, Venezuela y Guatemala.
Queda de nuestra parte utilizar los recursos con conciencia y no desperdiciar la energía eléctrica y cuidar el consumo del agua. Mientras más colaboremos, menos problemas traeremos al planeta y por lo tanto, a nosotros mismos. Recordemos que las energías renovables no convencionales también están ahí para ser usadas y ayudar a la conservación del planeta.